14 sept 2021

INGLES: WH-QUESTIONS

 Tipos de wh-questions

Las preguntas básicas ‘wh’ que evidencian la dirección de la información que se quiere conseguir son las siguientes:

  • what (‘qué’). Ej. What are you doing? ¿Qué estas haciendo? 
  • which (‘cuál’, ‘cuáles’). Ej. Which is your favorite color? ¿Cuál es tu color favorito?
  • 'when (‘cuándo’). Ej. When is your birthday? ¿Cuándo es tu cumpleaños?
  • where (‘dónde’). Ej. Where is your pet? ¿Dónde está tu mascota?
  • who (‘quién’). Ej. Who is your brother? ¿Quién es tu hermano?
  • whose (‘de quién’). Ej. Whose pet is this? ¿De quién esta mascota?
  • ‘whom’ (‘a quién’). Ej. Whom did you visit at the hospital? ¿A quién visitaste en el hospital?


A partir de estos vocablos se abren nuevas variantes, como:

  • ‘what else’ (‘qué más’)
  • ‘what time’ (‘qué hora’)
  • ‘what kind’ (‘qué clase’)
  • ‘who else’ (‘quién más’)
  • ‘where else’ (‘dónde más’)

Por último, aparece una única interrogación que semánticamente pertenece a la categoría de las ‘wh’, pero que no empieza con esos caracteres: esta es ‘how’, que significa ‘cómo’.

También de ‘how’ se derivan otras preguntas como ‘how much’ (‘cuánto’), ‘how many’ (‘cuántos’), ‘how often’ (‘con qué frecuencia’), ‘how long’ (‘cuánto tiempo’), ‘how late’ (‘cuán tarde’), ‘how long ago’ (‘hace cuánto tiempo’) o ‘how soon’ (‘cuán pronto’).


FUENTE:   HELGUERA CAPACITACION @helgueracap

5 sept 2021

NICANOR PARRA POETA CHILENO

 Nicanor Parra

Poeta, fisico y matemático chileno


(Nicanor Segundo Parra Sandoval; San Fabián de Alico, 5-9-1914 - La Reina, Santiago, 23-12018,  103 años)

Poeta chileno. Nicanor Parra fue el creador de la llamada «antipoesía», tendencia que no ha de entenderse como una negación del género ni de su función comunicativa, sino como una voluntad de erradicar sacralizaciones y excesos retóricos en favor de un coloquialismo a menudo mordaz, políticamente comprometido y, sobre todo, próximo al alma y a la expresión popular. Junto con Gabriela Mistral, Pablo Neruda y Vicente Huidobro, es considerado uno de los grandes poetas chilenos, y ocupa un lugar de honor entre las mejores voces de la lírica latinoamericana del siglo XX.


ES OLVIDO


Juro que no recuerdo ni su nombre,
Mas moriré llamándola María,
No por simple capricho de poeta:
Por su aspecto de plaza de provincia.
¡Tiempos aquellos!, yo un espantapájaros,
Ella una joven pálida y sombría.
Al volver una tarde del Liceo
Supe de la su muerte inmerecida,
Nueva que me causó tal desengaño
Que derramé una lágrima al oírla.
Una lágrima, sí, ¡quién lo creyera!
Y eso que soy persona de energía.
Si he de conceder crédito a lo dicho
Por la gente que trajo la noticia
Debo creer, sin vacilar un punto,
Que murió con mi nombre en las pupilas,
Hecho que me sorprende, porque nunca
Fue para mí otra cosa que una amiga.
Nunca tuve con ella más que simples
Relaciones de estricta cortesía,
Nada más que palabras y palabras
Y una que otra mención de golondrinas.
La conocí en mi pueblo (de mi pueblo
Sólo queda un puñado de cenizas),
Pero jamás vi en ella otro destino
Que el de una joven triste y pensativa.
Tanto fue así que hasta llegué a tratarla
Con el celeste nombre de María,
Circunstancia que prueba claramente
La exactitud central de mi doctrina.
Puede ser que una vez la haya besado,
¡Quién es el que no besa a sus amigas!
Pero tened presente que lo hice
Sin darme cuenta bien de lo que hacía.
No negaré, eso sí, que me gustaba
Su inmaterial y vaga compañía
Que era como el espíritu sereno
Que a las flores domésticas anima.
Yo no puedo ocultar de ningún modo
La importancia que tuvo su sonrisa
Ni desvirtuar el favorable influjo
Que hasta en las mismas piedras ejercía.
Agreguemos, aun, que de la noche
Fueron sus ojos fuente fidedigna.
Mas, a pesar de todo, es necesario
Que comprendan que yo no la quería
Sino con ese vago sentimiento
Con que a un pariente enfermo se designa.
Sin embargo sucede, sin embargo,
Lo que a esta fecha aún me maravilla,
Ese inaudito y singular ejemplo
De morir con mi nombre en las pupilas,
Ella, múltiple rosa inmaculada,
Ella que era una lámpara legítima.
Tiene razón, mucha razón, la gente
Que se pasa quejando noche y día
De que el mundo traidor en que vivimos
Vale menos que rueda detenida:
Mucho más honorable es una tumba,
Vale más una hoja enmohecida,
Nada es verdad, aquí nada perdura,
Ni el color del cristal con que se mira.
Hoy es un día azul de primavera,
Creo que moriré de poesía,
De esa famosa joven melancólica
No recuerdo ni el nombre que tenía.
Sólo sé que pasó por este mundo
Como una paloma fugitiva:
La olvidé sin quererlo, lentamente,
Como todas las cosas de la vida.